Prefiero saber que
vives, que amas, que lloras, que ríes. Bella, dulce, amable y lejana como las
estrellas de la constelación de capricornio, que iluminan el cielo sobre mi
cabeza. Como dios jugando en un juego de cubilete el destino de las líneas de
mis manos y sé que voy a perder.
Prefiero
saber que vives en letras, música e imágenes. Borrosa y fantasmal, como
recuerdos en la memoria, como secuencia de cine mudo, como luz blanca
parpadeando al fondo de un largo pasillo oscuro, como el efecto de la sertralina la
primera vez.
No hay comentarios:
Publicar un comentario